Sentimientos que despierta tener un hijo

Desde que nos enteramos que llevamos un hijo en nuestro vientre experimentamos muchas sensaciones que jamás imaginaste sentir. La maternidad produce un cambio muy profundo en toda mujer, se experimentan muchos sentimientos intensos tales como:  

El Vínculo con el hijo

Con el pasar del tiempo se va generando un vínculo con tu hijo inquebrantable, desde que empiezas a sentir sus latidos, sus pataditas, sus movimientos, va creciendo en ti un amor único. Generalmente este vínculo te permite avanzar con mayor facilidad y afrontar el reto de ser madre de la mejor manera. Además, este vínculo te permite conocer a tu hijo mejor que nadie, inclusive algunas veces puedes presentir lo que va a suceder, a lo que muchos llaman "el sexto sentido de las madres". 

Instinto de protección 

Un bebé te inspira ternura haciendo que nazca en ti un fuerte instinto de protección, que te hace capaz de sacar fuerzas inimaginables por tu hijo y afrontar cualquier reto u obstáculo que se presente.

Sentimiento de responsabilidad

Este sentimiento de responsabilidad, es muy diferente a todos los que hayas experimentado antes, si bien antes sentías responsabilidad en el trabajo, en el hogar, con tus finanzas, etc. La responsabilidad de tener un hijo es algo diferente, pues como madre eres responsable de velar por su sano y feliz desarrollo desde su alimentación, enseñarle a caminar, hablar, a valerse por sí mismo hasta convertirlo en persona íntegra, capaz de valerse por sí misma. Disfrutar de ese proceso es maravilloso, aunque no voy a negar que es agotador, pero vale la pena vivirlo.

Paciencia extrema

Ser madre te hace sacar una paciencia que no imaginaste tener. Muchas veces veía bebés llorar sin parar o hacer pataletas en los centros comerciales y me preguntaba ¿cómo aquellas madres podían manejar esas situaciones?, ahora como madre siento todo fluye naturalmente, porque en ese momento lo más importante es el bienestar de tu bebé y satisfacer sus necesidades. Para satisfacer sus necesidades lo único que se necesita es mucho amor y paciencia.

Generosidad absoluta

Como madre buscas el bienestar de tu hijo de manera desinteresada y natural, todo lo que quieres o deseas ya no es solo para ti, sino para tu bebé, todo lo que haces lo haces pensando primero en tu bebé. Como cuando sales de compras siempre llegas a casa con algo para tu bebé, inclusive hay muchas madres que prefieren dejar de comer para que sus hijos lo puedan hacer.

Resistencia sin límites

Una madre llega a resistir cosas inimaginables por su hijo y su bienestar. Te sorprenderás la mujer fuerte que puedes ser. Te darás cuenta que puedes ir más allá de tus límites y del límite de tus límites, pues para una madre sencillamente no existen barreras cuando se trata de su hijo. Por ejemplo, antes de tener mi bebé no me creía capaz de pasar días sin dormir bien y menos despertar en las noches tras mínimo ruido y ahora lo hago.  

La mejor compañía 

Desde que escuchas su primer llanto al nacer, lo primero que sientes es que jamás nadie los va a separar, y que la conexión generada entre ustedes hará que nunca te sientas sola. 

Lo mejor es saber disfrutar del proceso y aprender cada día.

¿Qué sentimientos nacieron en ti, desde que te enteraste de la llegada de tu bebé?