Conociendo el zoológico de Huachipa
Como padres sentimos una enorme necesidad de llevar a nuestros hijos al zoológico para que puedan ver de cerca e interactuar con diferentes animalitos, (muchos de ellos inclusive en peligro de extinción) y sobre todo para pasar lindos momentos en familia. Recuerdo que siempre que venía de visita a Lima, mis padres me llevaban al parque de las leyendas, uno de los más populares de Perú.
Es así que en enero aprovechando la visita de mi mamá y hermanito (siete años), decidimos ir a conocer el parque zoológico de Huachipa. Estábamos muy emocionados sobre todo por conocer el acuario del que tanto habíamos escuchado hablar, también de conocer la zona de la sábana africana, el dromedario y de otros animales que no hay en otros parques de Lima.
Fuimos un sábado, un día muy soleado. Llegamos al parque eso de las 11:30 de la mañana, debido al intenso trafico. Aun así no tuvimos inconvenientes para encontrar estacionamiento y en la boleteria tampoco había mucha cola, así que compramos las entradas súper rápido. Luego ingresamos al zoológico para iniciar el recorrido. Empezamos por la zona de los flamencos, que queda justo frente a la DinoZoo y mi hermano que es un fanático de los dinosaurios no se podía perder eso e ingresó con mi mamá. Lo único que les puedo contar de la DinoZoo es que mi hermanito salió fascinado😊.
Mientras esperábamos, aprovechamos para que pequeña de diez meses, conozca a los flamencos, quedo encantada y muy emocionada, pues era la primera vez que salíamos con ella a un parque de está naturaleza.
Seguimos el recorrido con un poco de dificultad para pasar con el coche por algunas partes de la granja y la zona de los camélidos sudamericanos, pero nada que no se pueda superar, dimos un breve recorrido por estas zonas. Y luego nos dirigimos al felinario, donde pudimos conocer a los tigres blancos, leones... Hasta que llegamos a acuario, dejamos el coche afuera, porque no te dejan ingresar con coche a esta zona.
El acuario esta lleno de aventura submarina, ver tantas especies juntas de diferentes colores, de diferentes formas con las cuales podemos interactuar como las rayas, erizos, estrellas de mar, pulpos... nos recargó de energías, mi hermano y mi pequeña estaban súper emocionados y felices. También pudimos ver a los peces payasos y cirujanos azules que hacen que de inmediato te venga a la mente la película 'Buscando a Nemo'.
Luego, fuimos a ver al águila y desde lo alto pudimos ver a los dromedarios, enormes mamíferos del desierto (una linda pareja Victor y Victoria), quedamos fascinados con estos animalitos. Siguiendo el recorrido pasamos por la isla de monos, la zona donde estaban los pingüinos. Estábamos cansados y con mucha hambre. Que decidimos ir en busca de almuerzo.
Fuimos a buscar comida, dentro del parque habían diferentes restaurantes y optamos por uno de la selva, donde mi mamá se pidió una riquísima trucha frita, yo pedí un caldo de gallina para poder compartir con mi pequeña, mi hermano se pidió algo con papas fritas y mi pareja la verdad que no recuerdo jajajaja.
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Luego fuimos un rato a descansar por la zona de recreación, y mi hermano se paseaba por el barco pirata, haciendo sus travesuras para hacer reír a mi pequeña.
Para terminar el recorrido fuimos a conocer a Ruben, la joven jirafa del zoológico, porque sencillamente ya no teníamos energías para conocer todos los atractivos del parque. Nos falto mucho por recorrer y conocer la zona de la selva, la parte donde estaban los canguros, la laguna y muchos otros que sin duda queda pendiente para otra visita cuando mi pequeña este más grande :).
Importante cuando vayas a salir al parque o zoológico, NO OLVIDAR:
Sigamos divirtiéndonos en familia.
Es así que en enero aprovechando la visita de mi mamá y hermanito (siete años), decidimos ir a conocer el parque zoológico de Huachipa. Estábamos muy emocionados sobre todo por conocer el acuario del que tanto habíamos escuchado hablar, también de conocer la zona de la sábana africana, el dromedario y de otros animales que no hay en otros parques de Lima.
Fuimos un sábado, un día muy soleado. Llegamos al parque eso de las 11:30 de la mañana, debido al intenso trafico. Aun así no tuvimos inconvenientes para encontrar estacionamiento y en la boleteria tampoco había mucha cola, así que compramos las entradas súper rápido. Luego ingresamos al zoológico para iniciar el recorrido. Empezamos por la zona de los flamencos, que queda justo frente a la DinoZoo y mi hermano que es un fanático de los dinosaurios no se podía perder eso e ingresó con mi mamá. Lo único que les puedo contar de la DinoZoo es que mi hermanito salió fascinado😊.
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Seguimos el recorrido con un poco de dificultad para pasar con el coche por algunas partes de la granja y la zona de los camélidos sudamericanos, pero nada que no se pueda superar, dimos un breve recorrido por estas zonas. Y luego nos dirigimos al felinario, donde pudimos conocer a los tigres blancos, leones... Hasta que llegamos a acuario, dejamos el coche afuera, porque no te dejan ingresar con coche a esta zona.
El acuario esta lleno de aventura submarina, ver tantas especies juntas de diferentes colores, de diferentes formas con las cuales podemos interactuar como las rayas, erizos, estrellas de mar, pulpos... nos recargó de energías, mi hermano y mi pequeña estaban súper emocionados y felices. También pudimos ver a los peces payasos y cirujanos azules que hacen que de inmediato te venga a la mente la película 'Buscando a Nemo'.
Luego, fuimos a ver al águila y desde lo alto pudimos ver a los dromedarios, enormes mamíferos del desierto (una linda pareja Victor y Victoria), quedamos fascinados con estos animalitos. Siguiendo el recorrido pasamos por la isla de monos, la zona donde estaban los pingüinos. Estábamos cansados y con mucha hambre. Que decidimos ir en busca de almuerzo.
Fuimos a buscar comida, dentro del parque habían diferentes restaurantes y optamos por uno de la selva, donde mi mamá se pidió una riquísima trucha frita, yo pedí un caldo de gallina para poder compartir con mi pequeña, mi hermano se pidió algo con papas fritas y mi pareja la verdad que no recuerdo jajajaja.
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Luego fuimos un rato a descansar por la zona de recreación, y mi hermano se paseaba por el barco pirata, haciendo sus travesuras para hacer reír a mi pequeña.
Para terminar el recorrido fuimos a conocer a Ruben, la joven jirafa del zoológico, porque sencillamente ya no teníamos energías para conocer todos los atractivos del parque. Nos falto mucho por recorrer y conocer la zona de la selva, la parte donde estaban los canguros, la laguna y muchos otros que sin duda queda pendiente para otra visita cuando mi pequeña este más grande :).
Importante cuando vayas a salir al parque o zoológico, NO OLVIDAR:
- Llevar el coche de tu pequeño, porque así tu hijo ya camine el zoológico es grande y muchas veces se cansan de caminar, es ahí donde el coche será tu salvación.
- Llevar una mochila cómoda para acomodar las cosas, una ropa de cambio, pañales y pañitos que tu hijo pueda necesitar, procura seleccionar lo básico para que no cargues tanto.
- Llevar algún snack, una fruta y abundante agua, porque de seguro le dará hambre y sed.
- Una bolsa para los desperdicios.
- El bloqueador y un repelente.
- Puedes quedar en un acuerdo con tu hijo y familia para priorizar el recorrido por las zonas que más le llamen la atención o por las zonas que todavía no han visitado.
Sigamos divirtiéndonos en familia.
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